Cool Water de Davidoff, lanzado en 1988, marcó una era con su frescura inconfundible. Creado por Pierre Bourdon, combina notas de agua de mar y menta con un toque verde y especiado que revolucionó las fragancias masculinas.
Sus notas de corazón florales, con jazmín y neroli, suavizan el carácter acuático, mientras el fondo amaderado de cedro y tabaco añade profundidad. Es un clásico que capturó el espíritu de los 80 con su vibra refrescante y limpia, destacando entre los perfumes de su época.
Considerado un pionero en la categoría aromática acuática, sigue siendo una elección nostálgica y elegante para quienes buscan frescura clásica.
